Firmas que quizá no conozcas y deberías tener en cuenta si vas a comprar un traje
Suitsupply
En el año 2000 nacía esta marca holandesa que, en menos de dos décadas, ya se extiende por los cinco continentes. La razón de su éxito reside entre columnas principales: la atención al fit (utiliza la estética clásica y actualiza sus cortes trayéndolos al presente), una fuerte estrategia digital (donde condesa toda su acción publicitaria) y una forma de construir sus trajes que The Wall Street Journal comparó con la de las grandes firmas de lujo. Lo mejor de todo es que sus precios apenas se acercan a los de cuatro cifras de esas casas high fashion. A partir de 259 € puedes encontrar un dos piezas de lujo.
Officine Générale
La suya podría definirse como la sastrería con más allure francés. En 2012, Pierre Mahéo fundaba su enseña tras haber trabajado en varias firmas de moda. Su propuesta funcionó tan bien que desde 2014 forma parte del calendario habitual de Paris Fashion Week. Si te inscribes en su oficina, encontrarás trajes relajados y desestructurados, sin forro en verano, pero siempre guardando los códigos clásicos dentro de su vanguardia. Sabe bien lo que se hace este nieto de sastre e hijo de recogedor de ostras, combina chaquetas slim con pantalones que dejan espacio para sentarse sin apreturas, una mezcla perfecta entre sastrería y ropa de trabajo. Además, no tendrás problemas para despiezarlos y recombinar sus piezas en clave casual, con vaqueros o camiseta.
De Fursac
Saint-Pierre-de-Fursac. Francia. 1973. Estas son las señas que identifican a esta marca que tomó su nombre de la localidad donde se fundó. En los años 80 se convirtió en un gran referente para la moda masculina y fue uno de los responsables de asentar lo que todos conoceríamos como nuevo chic francés. Sus tejidos italianos se mezclan con la herencia sport de la cultura francesa, obteniendo como resultado colecciones fáciles de llevar y que encajan a la perfección con el dinamismo de los hombre de negocios de hoy en día. Es la mejor opción si lo que buscas es el desenfado francés combinado con el regusto italiano por la sastrería.
Sandro
No nos movemos de Francia. ¿Puede que estemos ante la cuna de la nueva sastrería? En 2007, Ilan Chetrite –hijo de Évelyne Chetrite, fundadora de la firma– inauguraban la división masculina de la casa, la principal novedad desde su apertura en 1984. Si tienes problema para encontrar trajes de tu talla porque todos te quedan grandes, puede que Sandro sea tu tabla de salvación. Sin llegar a los extremos, sus cortes slim y sus patrones más cortos de lo normal harán las delicias de aquellos con mayor apego al suelo (o gusto por los cortes crop).