Farsas científicas que engañaron al mundo; Maggie Simpson y Edna Krabappel hicieron uno
La ciencia es una de nuestras mejores herramientas de conocimiento, pero tampoco es perfecta y no está exenta de fraudes y mentiras. Hay quienes publicaron “estudios científicos” que causaron mucho impacto, pero que resultaron ser completamente falsos.
Para muchas personas cualquier hecho resulta creíble y cierto siempre que lleve el nombre de alguna autoridad científica, o incluso basta que se diga que un estudio fue realizado por una universidad de prestigio para afirmar que debe ser completamente cierto. Pero la realidad es que no todos quienes dicen ser científicos lo son y no todos los estudios tienen pruebas que los respalden.
Ellos aseguraron haber realizado grandes descubrimientos en diferentes áreas científicas, pero toda su investigación resultó un fraude. Aunque también están los casos de cazadores de fraudes que desenmascararon a revistas supuestamente científicas, pero que publicaban cualquier cosa inventada. Estas son 13 farsas que se hicieron pasar por estudios serios y engañaron a muchas personas:
1. Arqueólogo que enterraba fósiles
Shinichi Fujimura alcanzó una gran fama como arqueólogo por sus hallazgos de fósiles. Él y un colaborador exploraban diferentes lugares y siempre que hacían excavaciones, terminaban encontrando fósiles a la vista de todos. Pues claro ¿cómo iban a equivocarse, si ellos mismos los enterraban unos días antes? Al ser descubiertos, el colaborador se suicidó y Shinichi terminó recluido en una institución psiquiátrica.
2. Experta en caninos
La doctora Olivia Doll era supuestamente una médica experta, que logró publicar estudios y ser parte del consejo editorial de siete revistas médicas internacionales. Pero después se supo que ella en realidad era un perro. Su dueño, el profesor Mike Daube, es un experto en salud pública y creó al personaje de Olivia para desenmascarar las estafas de diarios y publicaciones académicas.
3. Estudio firmado por caricaturas
Las revistas Journal of Computational Intelligence and Electronic Systems y Aperito Journal of NanoScience Technology publicaron un serio estudio tecnológico titulado “Configuraciones difusas y homogéneas”. Todo parecía muy bien, hasta que descubrieron que los autores eran Edna Krabappel, Maggie Simpson y Kim Jong Fun, y que los dos primeros son realmente personajes de la serie animada Los Simpson.
4. Investigación de las cotorras
El veterinario español Jesús Ángel Lemus Loarte alarmó a los habitantes de Barcelona, porque según él casi la mitad de las cotorras de la localidad tenían el virus que produce la psitacosis, una enfermedad que se puede transmitir a los humanos. Sin embargo, antes de que cundiera el pánico, un grupo de investigadores le tendieron una trampa y descubrieron que todo había sido un engaño.
5. El médico de Obama y el Papa
El prestigio del doctor Paolo Macchiarini se elevó cuando él hizo saber al mundo que había operado al expresidente Obama y al Papa Francisco. Sin embargo, después comenzó a tratar con pacientes que necesitaban transplantes de tráquea y 17 de ellos murieron. Cuando tuvo problemas legales por esa situación, fue que se descubrió que su reputación había sido inventada.
6. La ficticia Anna Olga Szust
Más de 300 revistas científicas recibieron el currículum de una mujer llamada Anna Olga, quien pedía que le permitieran publicar sus estudios. Fueron ocho revistas quienes aceptaron su petición, pero luego se enteraron que ella no existía, sino que fue creada por un grupo de investigadores polacos que querían evidenciar la falta de criterio de algunas revistas para publicar escritos científicos.
7. El fósil que engañó a National Geographic
Uno de los mayores medios de divulgación científica también resultó engañado por un fósil falso. En 1999, National Geographic anunció el descubrimiento del Archaeraptor Lianingensis, una especie fosilizada que cambiaría el rumbo de los estudios evolutivos. Sin embargo, un escaneo posterior reveló que la criatura era falsa y que había sido creada a partir de un pequeño carnívoro al que le añadieron partes de un ave.
Deja un comentario