Cosas que un hombre necesita hacer en una relacion exitosa

Cuando estás inmersa en una relación desde hace tiempo y te sientes bien, segura, el sexo quizás no sea tan pasional y frecuente como en los primeros meses de relación. Pero una nueva investigación de la Universidad de Toronto ha dado con el secreto para tener una vida sexual feliz sin que importen los años que llevéis juntos.

Para realizar el estudio, los investigadores entrevistaron a 1.900 heterosexuales y homosexuales para saber lo satisfechos que estaban con sus vidas sexuales. En base a las respuestas, los investigadores dividieron a los participantes en dos grupos: los que creían que la satisfacción sexual se consigue a base de dedicación y los que creían que es cosa del destino y que se alcanza encontrando a una pareja compatible. ¿El resultado? Los del primer grupo tenían una vida sexual más apasionada que los segundos. Es decir, que no basta con esperar a que pase. Hay que actuar.

Pero hay más. Los científicos también descubrieron que, por lo general, en todas las relaciones hay una fase de luna de miel que dura entre dos y tres años. Durante ese tiempo, tanto las personas que se incluyen en un grupo como en el otro suelen tener una vida sexual satisfactoria. Pero superada esa barrera temporal, los que se preocupan por tener un buen sexo son los más satisfechos.

Además, los investigadores constataron que las mujeres son más propensas a creer en las almas gemelas y en el destino romántico frente a los hombres. Pero al mismo tiempo, somos más conscientes de que el sexo requiere tiempo y atención. Guiño guiño.

La autora principal del estudio, Jessica Maxwell, considera que esto se deba a que las mujeres “sabemos que el sexo no siempre va a ser perfecto en las relaciones a largo plazo y que el deseo sexual suele disminuir “. Por ello, cree que las personas “que están más preparadas para manejar estos desafíos son las que tienen una visión más pragmática del sexo y están dispuestas a actuar para hacer que sea mejor.”

En resumen: Preocuparte por tener una vida sexual mejor, dedicándole tiempo y ganas.